Cuando el desdén cubano se convierte en desaliño cuando de política se trata

Por José A. Montoya

Asuntos cubanos - Después de meses de no ver los programas de careo y bateo miamense de esos dónde se recurre a la chusmería, el brete y la falta de ética y profesionalismo y dónde la mayoría de los presentes invitados se consideran ciencias y sesudos comenzando por algunos presentadores de marras ambiental territorial que por demás se jactan hasta decir algunos de ellos que lo que no les plazca allí no llega y condenan públicamente a Juana y a su hermana, refiriéndose a los medios dónde laboran por su condición de ser entre lo peor el favorito del show pagano, lo que significa que todo es cuestión de monopolio e incesto de control un costumbrismo atroz que se vive en la mayoría de los medios hispanos en el sur de la Florida, claro está que se justifica la censura de esos medios a quienes cómo en mi caso no les plantamos públicamente y les decimos las verdades, todas basadas en sus calumnias claro, porque no existe mejor testimonio que un día tras del otro, al final del caso terminan sin moral alguna, y existimos aquellos que tenemos réplica eterna frente a esos desaliñados medios de “información” que deberían de aclararse que muchos son más bien desinformarte que informantes de la verdad, pues les cuento que me senté a ver uno de esos programas ayer Lunes y me dije “caballero, es increíble que pasen los meses y siga la misma letrina descompuesta funcionando” pues les cuento.

Allá en Cuba la disidencia dejó de tener cobertura de los medios en Miami y cómo decaían en la publicidad pues inventaron una marcha general no se cuantas organizaciones que se dicen opositoras en Cuba y que cuentan unas con dos miembros y otras con más o menos cien de ellos, pues surge la controversia y se arma el show en Miami, cuando un autodefinido  opositor se niega ha asistir a la marcha convocada por otros grupos, él renegado en este caso Eliecer Ávila quien se destacó por cuestionar a Ricardo Alarcón en Cuba un destacado comunista que formó parte de la cúpula del exmandatario Fidel Castro y ahora en decadencia en la nueva administración Raulista, pues Eliecer dice en un vídeo que “El no marcha con corruptos” entre otras declaraciones de principio, mientras que un León sordo de esos en Cuba es quién ataca al opositor o disidente cómo lo quieran llamar, otros disidentes tampoco se sumaron a la tal marcha, en fin, ¡hay noticias señores! se alegran los medios de difusión anteriormente mencionados pues hay algo que decir de Cuba en Miami que no sean los puntos beneficios a la apertura en Cuba las cuales son mal vistas y atacadas, los representantes se quejan de falta de unidad y de división y se enfrentan en un sal para afuera o pujanza de poder y reconocimiento que mete miedo, con tan sólo 4 gatos señores, ¿Qué pasaría si fueran cientos de miles?

A todo eso yo le sigo llamando el desdén que se convierte en desaliño de una falacia política que jamás ha incursionado más allá de los medios de comunicación de Miami, nada que ver con el pueblo cubano, al cuál hasta la fecha y pinta que sea eterno el caso, sólo tienen su mirada en el norte, Estados Unidos de norte América “La Yuma” por los que les da igual salir echando un pie mientras puedan cómo que los Yuma lleguen definitivamente a Cuba, la cosa es al final de cuentas, un asunto de buscar la manera de alentar la publicidad así caiga quién caiga, eso me recuerda Miami en su días de apogeo cubano cuando a cualquiera lo tomaban de chivo expiatorio para hacer noticias sobre Cuba, la cosa era acusar a cualquiera de cualquier cosa favorable a sus mentiras así le costara la vida a la víctima junto a sus familiares, algo parecido al caso de Carlos Muñiz en Puerto Rico que fue asesinado por el sólo hecho de querer que los cubanos visitaran la isla, algo que hoy día hasta lo anuncian en los medios de Miami “las agencias de viajes” en esos mismo medios dónde nada que tuviera que ver con el castrismo era bienvenido y sí atacado día a día, ¡En fin! por eso yo no creo ni en la madre que me parió, y conste, que sí puedo demostrar cómo en Cuba se puede unir a medio mundo, sólo que ya no es necesario, por lo menos ahora, no sé mañana.