Por. José A. Montoya
Elecciones 2016. Por primera vez opinaré. Reflexión “Las sandeces” de las “Sandeces” - No existe privilegio más grande en el ser humano que reconocer las cosas, entre ellas que en la existencia nadie es santo, quién se catalogue de santo es simplemente un hipócrita que no merece respeto alguno, y quiénes acusen a otros de inmorales tendrán que taparse los ojos porque por el sólo echo de alguien comprometido con una pareja mire a otra y la admire o desee sexualmente con el pensamiento ¡Eso es un acto inmoral! el alarde es característico de la mayoría de los seres humanos para sentir superiores o admirados exageran o alardean incluso hasta de actos irreales, claro está que cuando somos personas civilizadas no discutimos con los energúmenos y muchos menos con los que hablan sandeces, no es ninguna ofensa señores decir la verdad y en mi caso eso hago, decir la verdad, incluso cuando la verdad me afecte de manera personal ¿Por qué? porque la honestidad hace daño y molesta a la mayoría de los seres humanos pero es una gran virtud el ser honestos, y jamás mentir, a no ser para entretener a nuestras amistades, seres queridos o a aquellos que nos admiran, ahora, lo peor que un ser humano puede tener cómo defecto es engañarse así mismo y de eso estoy seguro que abundan en todas partes, los que se engañan ellos mismos debido a su amargura y a ese gran defecto que poseen muchos y es el ser de los peores hipócritas, por ello, es preferible el que molesta con su sinceridad y sus verdades que el cínico e hipócrita porque estos últimos al final de la jornada serán los traidores, aquellos que jamás tendrán la facilidad de poder ser odiados o admirado, y quizás amado por todos, porque precisamente señores el más sincero es el más amado y el mentiroso e hipócrita es seguido por sus semejantes…