El día que los traidores a la revolución cubana se convirtieron en pandilleros en Miami y La Caperucita roja

El día que los traidores a la revolución cubana se convirtieron en pandilleros en Miami y La Caperucita roja

Por. José A. Montoya

Miami & Cuba - En Miami decir la verdad de la realidad que se vive referente al panorama ideológico cubano es ser acusado de inmediato de comunista, de agente  de la seguridad del estado cubano y sin mucha tibieza ni morosidad saltan los lamebotas y títeres para acosar y ofender a quién libremente hace uso de la libertad de expresión que garantiza la constitución estadounidense americana y con la cuál se limpian el trasero, pero no, eso de libertad de expresión no funciona en Miami, todo se trata de un sólo concepto de interpretación de la libertad de expresión, la tienen los poderosos y solamente aquellos que estén ligados a la corriente benefactora del anticastrismo cubano liderado en casi el 98% por individuos que han sido traidores a la revolución cubana y con su cartelito colgado de “Exiliado alegando el haberse dado cuenta de que en Cuba son unos tiranos los gobernantes” ¡Pero no sólo eso! auto y seguido comienzan su labor de destrucción masiva y violadores de los derechos de los demás utilizando la compilación, la conspiración y las conexiones influyentes de los que controlan y dirigen las agendas de poder pandilleril político e ideológico en Miami. 

Al parecer la cosa no se trata de comunismo sino de utilizar los criterios y agendas de un tal libro que circula por el Mundo y pueden leerlos en la internet titulado “Los protocolos de los sabios de Sión” donde en su protocolo 27 de Brasilia siglos atrás exponen que es inminente copar y controlar todos los medios de comunicación “Porque si lo controlan serían dueños del Mundo” lo que al parecer le ha resultado a aquellos que en Miami por décadas controlan la opinión publica a través de los medios de difusión de radio, televisión y prensa escrita dónde existen listas negras de censura a aquellos que no deben o no pueden dejarles hablar, mientras que los esbirros traidores al régimen cubano en Miami se encargan de socavar persiguiendo a los contestatarios de muchas formas, principalmente perjudicando a éstos en la economía, los negocios o las relaciones públicas, y más aún, si se trata de una figura pública desacreditarla con mentiras y falsas acusaciones, por ejemplo, a mí me han acusado de comunista, agente de Cuba, de ser un general cubano infiltrado, de la seguridad del estado cubano, de tener una agenda castrista en Miami, de ser amigo particular del desaparecido mandatario y líder Fidel Castro Ruz, y jamás he tenido vínculos ni con los castristas  ni con los anticastristas,  No defiendo al régimen de Cuba, no viajo a Cuba, no apoyo al régimen cubano cómo lo han hecho públicamente individuos cómo por ejemplo el ex alcalde Raúl Martínez hoy día influyente en Miami, en fin, los traidores y los colaboradores al régimen de Cuba son influyentes en Miami y el rebelde contra todas las banderas de las mentiras es el culpable, hay que ser ignorante de verdad para seguir creyéndoles a esta escoria la historia de la Caperucita roja y el Lobo Feroz. En Miami se cambia la versión del cuento así “La Caperucita roja va por el bosque cantando y de repente el Lobo le sale y le dice ¿Dónde vas Caperucita” y ella le dice ¡Voy al río a lavarme el bollo! y el Lobo Feroz dice ¡Coño cómo ha cambiado este cuento!