Para que en Cuba haya reconciliación deben de dejar de existir la tiranía de Cuba y el anticastrismo de Miami

Para que en Cuba haya reconciliación deben de dejar de existir la tiranía de Cuba y el anticastrismo de Miami

Por. José A. Montoya

Aunque todavía pienso vivir 30 años más Dios mediante, no dejaré de destacar sobre Cuba que “Para lo que me queda en el convento me cago adentro” y les aseguro que sí el régimen de la Habana me pudiera soportar tenga la completa seguridad de que entonces en la isla sí se permite la libertad de expresión, porque no crea en la tal disidencia viajera a Miami y aquella de periodistas en Cuba que todo eso es una farsa parte del aparato ideológico y propagandístico de la inteligencia cubana y una agenda muy bien cuadrada desde la época de Obama para hacer ver que Cuba ya no es la misma, “Y yo no lo dudo” porque nada semejante a cuando partí de Cuba en 1980 a Miami” Cuba claramente podemos calificarla cómo un campo de concentración nacional dónde el control público está fuera de sí y está claro que la delincuencia se ha apoderado de la isla, ellos son los que gobiernan las calles de todos los rincones cubanos, los delincuentes abanderados en su mayoría de Mayomberos, Babalawuos y Abakuá.   

Para que el pueblo cubano logre reconciliación primero tendrá que dejar de escuchar a aquellos que tanto desde de Cuba cómo desde Miami han logrado internamente monopolizar la opinión pública utilizando a la mayoría de los medios de información de radio, televisión y prensa escrita de Miami para descalificar a los demás sin ningún derecho e igual censurar las expresiones de aquellos que piensan diferentes a sus intereses pagos y a los poderes que sustentan precisamente esos intereses y quieren que solamente se escuche decir lo que únicamente sea beneficioso para sus propósitos de control de la desestabilización y de desunir al pueblo cubano. Mientras que sean censuradas las voces que verdaderamente representan la unidad y la fuerza popular tanto cívica y moral verdadera en la isla jamás se podrá llegar a la reconciliación, esto, cuando hablamos de reconciliar a los pocos intransigentes que quedan o a aquellos que no siendo intransigentes no convienen para para sus propósitos de monopolios políticos en el futuro de una Cuba democrática, sólo que, la corriente fuerte todo lo arrastra y al final de cuentas el fluido mayor con su poder de arrastre carga con todo, mientras existan esos proselitistas de falsos líderes en Miami y se solvente ese falso liderazgo, el régimen de la Habana albergará la esperanza de que dividir es vencer, mientras que los cubanos no admitan y reconozcan la existencia de una fuerza popular marginada y censurada que ha sido sustituida por falsas retóricas y denuncias de pacotilla, jamás habrá reconciliación y habrá régimen de dinastía por los siglos de los siglos. Amén. 

“Sabido es la existencia de la censura y las calumnias acusatorias  contra los verdaderos líderes que pueden concentrar a cientos de miles real” en cualquier parte, tanto en Cuba cómo en Miami es un hecho y para ellos claro los dos bandos una necesidad, los medios conspiradores se mantienen de la vista gorda cuando incluso se les está brindando la prueba al instante, ya que a muchos de esos famosos periodistas de Miami ya yo los he sometido a pruebas y se han mantenido “En silencio ha tenido que ser porque las cosas para lograrlas hay que mantenerlas ocultas” les caen muy bien las frases del apóstol Martí que precisamente fueron utilizadas por el régimen de la Habana y aún la sostienen, la mayoría de los medios de Miami se encuentran bajo el control de la tiranía Castrista y son precisamente los que juegan el mejor papel de censura y ataque o descalificación contra el verdadero liderazgo popular cubano. “Ignorantes aquellos que viendo llegar el Apocalipsis político en Cuba son bienaventurados por ver y creer en la mentira” José A. Montoya.